
Eso es lo que se nos cuenta en el blog de Perez Hilton, periodista nada homófobo, por cierto. No como Qwelane, que en un artículo que publicó en julio de 2008 en 'The Sunday Sun', pedía a los políticos sudafricanos que modificaran la Constitución del país para hacer imposible el matrimonio entre personas del mismo sexo (legal en Sudáfrica). El tipo cree que si se reconoce el matrimonio homosexual no hay razones para que algunos no pidan el reconocimiento del matrimonio entre hombres y animales. Pregunta la LLP, ¿cuántas mujeres ya están casadas con auténticos animales de forma legal? ¿No son acaso animales los parlamentarios de Uganda, país al que va a ir Qwelane como embajador, que quieren aprobar una ley para condenar a muerte o a cadena perpetua a los homosexuales?

Claro que enviando a un homófobo a un país homófobo, Sudáfrica se quita de encima un marrón ahora que está a punto de acoger un mundial de fútbol. La imagen es lo que cuenta, y el señor Qwelane, en Uganda, estará como dios, sobre todo si se aprueba la ley que podría condenar a muerte a los gays. Qué animalada, ¿no?
Por cierto, la LLP ha encontrado una bonita entrada contra el señor Qwelane, con poema incluido, que finaliza con la frase: Gay is here to stay. Buen lema para una manifestación contra este periodista y otras alimañas.
En cuanto a Portugal, siempre podemos ir a reventar la mani, en plan animal, y a comer marisco o a escuchar fado. Y si no, pasamos de todo y nos enchufamos a 'Mujeres desesperadas', a ver como Katherine se lía con una stripper que es amiga de Suzanne. Cómo mola. Es que soy muy animal, je.
1 comentario:
Gracias
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