Fin de la carretera. De nuevo aquí. En el blog, metida hasta las cejas en la clasificación de alvgunas fotografías del viaje de la LLP a Estados Unidos.
Y, oh, sorpresa, nada más abrir la web de El Público, leemos esta grata noticia: 'La Iglesia Episcopal de EEUU nombra obispos a un gay y una lesbiana'.
Qué curioso, porque en ese extraño país, a ratos sofisticada civilización y a ratos desolado desierto, arisco, maldito, seco de tests nucleares y de polis que duermen con gafas de sol, la proliferaación de emisoras religiosas, tanto de TV como de ondas hertzinaas, es preocupante.
Comentario de un locutar ultrareligioso sobre el tema del aborto y el argumento de que un nonato no es hasta X meses una persona: 'Es como volver a los años 50 y 60, cuando se negaba que los negros fueran personas (sic) ¿Hasta dónde van a llegar?'.
De momento, el jet lag (que queda muy pijo), me está haciendo pasar por una especie de ruta virtual llamada jet blog. Stop.
1 comentario:
Me alegro que estés de vuelta.Muy interesante la entrada. Un beso
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