Premio para el diccionario valenciano

Una vez más, la literatura va por delante de la iglesia y de muchas mentes supuestamente sabias. Por eso, la LLP quiere premiar a la Academia Valenciana de la Llengua.
Resulta que la esta institución ha incluido en la definición de matrimonio del futuro 'Diccionari Normatiu Valencià' la unión homosexual. Dicho sea de otra manera, el matrimonio gay.
Los valencianos se adelantan así a cualquier otro diccionario de la Península, el de la Real Academia y el de Institut d'Estudis Catalans, por ejemplo. Por una vez, en Valencia soplan vientos progresistas. ¿Será que algo está cambiando?

Lesbian vampire killers

La LLP ha recibido noticias de una película serie B que ha despertado su curiosidad: 'Lesbian vampirs killers'. Como dice Dorothy Snaker en afterellen.com, la gramática es en este título un detalle significativo: ¿es una película sobre vampiras lesbianas que matan?, ¿o sobre lesbianas que matan vampiros?, ¿o es sobre gente que mata vampiras lesbianas?
Os aconsejo que entréis en la web oficial del film, que se estrena el 20 de marzo, y os forméis una opinión propia. La cosa va de dos tíos que llegan a un pueblo perdido entre la bruma, que está habitado por vampiras lesbianas. Su misión (como suele ocurrir en las películas de vampiros): matarlas.
En fin, el humor está garantizado. Basta ver el trailer de la película: "En 2009, una película lo tiene todo. Asesinos, vampiros y lesbianas. Y el nombre de esta increíble película es 'Lesbian vampire killers'". Entre otras cosas hay espadas con mangos en forma de pene.
-Claaaaaaro, las lesbianas somos la ostia. Un pene en cada mano, si no, no somos felices -comenta Virginia.
Después de ver el trailer, lo único que LLP tiene claro es que no es una película de lesbianas.
-Puede que sea de humor, sí, pero no de lesbianas. Puede que sea de vampiros, sí. Pero no de lesbianas. Es más bien un film súper hetero -dice Wecandoit-. Para que puedan matarnos en la ficción.
-Ostras -interviene Virginia-. Yo pensaba que el tema de la lesbiana vampiro estaba superado. Se ve que voy demasiado rápido para los tiempos que corren, je, je. Tendré que ralentizar o inventar una nueva fantasía lesbiana para heteros, no sé, un faro (he dicho faro) plagado de lesbianas que hacen macramé. O una lesbiana reconvertida en heterosexual por la gracia divina de un mormón, o de Chuck Norris.

En fin, echarle un vistazo si os apetece y lo comentamos.

Cannavaro y las etiquetas

En una entrevista a la revista italiana 'Chi', se queja el defensa del Real Madrid, Fabio Cannavaro, de que a los italianos ya les cuelgan suficientes etiquetas negativas como para que la película 'Gomorra', dirigida por Matteo Garrone y basada en el libro del periodista Roberto Saviano sobre la mafia napolitana, incida en el tema de la camorra. Dice que así no se puede escapar de la ecuación 'italiano= mafioso'. Y que ese filme perjudica la imagen internacional de Italia.

La LLP quiere decirle a Cannavaro que él sí que perjudica esa imagen y, además de etiqueta de mafioso, se merece la de homófobo. Y es que, preguntado acerca de su vida en España y de los marimonios homosexuales se muestra contrario a ellos y dice: "En esto, quizás, soy más italiano". De lo que se infiere que los italianos deberían colgarse también la etiqueta de homófobos, ya que 'ser más italiano' parece implicar estar en contra de este tipo de matrimonios. ¿No es eso señor Cannavaro?

De la píldora y lo humano a los países árabes

Genial. Paradójico y divino. El Vaticano, que cree en el creacionismo, se descuelga ahora con una tesis supuestamente científica: el presidente de la Federación Internacional de Asociaciones de Médicos Católicos (FIAMC), Pedro José María Simón Castellví, asegura que los efectos ecológicos de la píldora anticonceptiva son "devastadores", por la liberación al medio ambiente de toneladas de hormonas a través de la orina, que causan infertilidad en los hombres.

Como explica Europa Press (he recurrido a una agencia de noticias para no parecer tendenciosa), en un artículo publicado en 'L'Osservatore Romano', Simón Castellví afirma que uno de los motivos de la infertilidad masculina en Occidente, con una baja producción de espermatozoides, es la "contaminación ambiental" provocada por la liberación de estas hormonas. "Nos hallamos frente un efecto ecológico claro que exige explicaciones de parte de los fabricantes", remarca Simón Castellví, quien agrega que "son conocidos" otros efectos secundarios de la combinación de estrógenos y progestínicos, entre los que cita el cancerígeno. Por si fuera poco este médico señala que, en el sexagésimo aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos, "se puede decir que los medios anticonceptivos violan al menos cinco importantes derechos": el derecho a la vida, a la salud, a la educación, a la información y a la igualdad entre los sexos, ya que "el peso de los anticonceptivos casi siempre recae sobre la mujer". En fin, se me ocurren otros muchos derechos por los que deberían preocuparse los catolicos, como el derecho a una vivienda, a un trabajo, a una muerte digna y a la libertad religiosa. No haré comentarios.


Afortunadamente tenemos una buena noticia: En Barcelona, a partir del 12 de enero, habrá autobuses con propaganda atea en sus carrocerías. Siguiendo el ejemplo británico y promovido por la UAL (Unión de Ateos y Librepensadores) y por Ateus de Catalunya entre otras entidades, este medio de transporte urbanota sido elegido para transmitir el siguiente mensaje: “PROBABLEMENTE DIOS NO EXISTE. DEJA DE PREOCUPARTE Y DISFRUTA LA VIDA”. Visitad la web www.bustaeo.org y disfrutad.


Acabo las tres entradas de año nuevo con una pregunta: ¿por qué los deportistas de élite no boicotean los torneos de fútbol, tenis y golf que organizan países árabes, como Dubai, en los que la mujer no tiene libertad ni para conducir? Eso es todo.

El papa ataca de nuevo

No nos engañemos. Es fantástico tener un papa de Roma que, además de parecerse al lado oscuro, diga que hay que protegerse contra los homosexuales. Eso siempre le da la oportunidad a la Liga de las Lesbianas Planetarias de ponerse en acción. Claro que, al final, puede ser aburrido por el exceso. Es como un festín orgiástico de despropósitos y falsos testimonios.
Ahora, ha dicho el sumo pontífice (suma y sigue con el silicio) que el mundo "necesita una ecología que salve a las personas normales de la amenaza de los homosexuales" igual que hacen falta políticas que protejan las selvas. ¿El símil tiene sentido?, se pregunta Virginia. ¿Una ecología? ¿Acaso no hay homosexuales que son más ecológicos que toda la curia romana junta? ¿Y acaso, se pregunta Wonder Woman, no hay miembros de la curia con tendencias más homosexuales que ecológicas? (Reprimidas, puede ser, pero no en todos los casos, basta consultar las hemerotecas para saberlo y ya decía alguien próximo al cielo aquello de "por sus actos los conoceréis").
En fin, que Benedicto XVI se ha lucido en estas fechas navideñas. Y es que la vanidad le puede. Quiere brillar más que todas las luces navideñas juntas y destacar y hacerse notar como si él fuese el mesías. Es como un letrero luminoso que anuncia rebajas e intenta captar clientes. Lo que Virginia no alcanza a entender es como teniendo de libro de cabecera la Biblia, no el papa parece no haber leído el Eclesiastés. Aquella parte que dice: Vanidad de vanidades, todo es vanidad.

Y esto ha salido publicado el mismo día en que debe dictarse sentencia al juez Calamita. Este hombre, auténtico cruzado y defensor a ultranza de las palabras papales, debería probar la justicia humana. Que no la divina, que está algo escorada a la derecha. A la derecha de un señor.